La casa original de la familia de 5 integrantes medía tan solo 129 m2 construidos y 54 m2 de patio y estacionamiento. Diez años atrás, tuvieron la oportunidad de comprar la casa No.1 y de 214 m2 y 35 m2 de estacionamiento, la cual utilizaron durante años como bodega.

Cuando nos buscaron, existía la duda de si arreglar ambas casa y venderlas, o de arreglar la más grande, cambiarse y vender la otra, o si arreglar ambas y vivír ahi.

De inmediato vimos la increíble posibilidad que había de unirlas y de darle el espacio que cada integrante requería con mayor espacialidad y luminosidad. Al unirlas quedó una casa de 343 m2, 89 m2 de estacionamiento-patio y 100 m2 de terrazas que antes eran techos sin aprovechar.

La unión de ambas casas se hizo abriendo diversos vanos por el muro medianero. Ahora, casa integrante de la familia tiene su propia habitación, su baño personal, terrazas, habitación para visitas, estudio, taller de pintura, biblioteca, sala, vestíbulo, comedor, antecomedor y una amplia cocina.

Se decidió mantener las dos escaleras existentes dándole una circulación fluida a toda la casa y dejando la posibilidad abierta de volver a dividir ambas casas en el futuro. La casa se modernizó por completo, quitándole al interior el aspecto rustico colonial original, pero manteniendo bóvedas, nichos y escaleras. Sin embargo, se cambiaron todos los acabados en pisos, muros, techos, iluminación, mobiliario y se reformaron los espacios dándoes mayor amplitud e iluminación al abrir varias ventanas a las vistas espectaculares que le rodea y que estaban ocultas detrás de muros cerrados. Uno de los aspectos más distintivos de esta casa, fue el diseño específico de la cancelería en soleras de herrería que le dieron el toque único y elegante y homogeneizaron todos los espacios.

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